Los pobres NO fueron lo primero en Oaxaca, revelan habitantes

Ni la seguridad, ni el combate a la pobreza resultan prioritarios para este gobierno. Después de casi seis años podemos decir que los pobres no fueron primero

TV Azteca
Noticias

“Este es el arco que le da la bienvenida a san Simón Zahuatlán en el estado de Oaxaca, este es el camino que lo lleva hasta el pueblo, desafortunadamente la realidad que viven más de 7 mil personas es muy distinta, no hay agua, no hay servicios de salud, no hay internet, entre otras muchas cosas”, relató Ulises.

Los pobres NO son primero


En el 2020, el Coneval lo ubicó como uno de los 10 municipios más pobres del país; para que se dé una idea, el 99.6 por ciento de los habitantes vive en pobreza.

Aquí solo hay una clínica para atender a la población, ahí trabajan una doctora y una enfermera de lunes a viernes, solamente... Quisimos entrevistarla y esa fue su reacción:


“Nunca nos han permitido esa clase de actividades; ¿por qué señorita? Porque somos una institución que pertenece al IMSS-Bienestar y es muy normativa, ya han venido a pedir entrevistas, pero no nos lo permiten, está prohibido”.

No les dan nada, ni siquiera salud.

El IMSS-Bienestar fue creado por el gobierno federal, bajo la promesa de ofrecer servicios de calidad y gratuitos.

Pero aquí, no se han podido salvar varias vidas ante la falta de medicamentos, de personal calificado y equipo profesional.

“Apenas tuvimos un incidente donde un niño lamentablemente murió (...) lo fueron a atender a la clínica, pero le digo por falta de medicamentos, no lo pudieron atender bien y lo tuvieron que trasladar hasta Huajuapan. Pero de ahí no se pudo hacer nada”, denunció un ayudante de Presidencia municipal.

“Mi papá es diabético (...) ¿Tiene que venir cada vez con tú papá a las citas?, pero para que si no tiene chiste, no dan receta, compré medicamento y la pura verdad, lo que toma mi papá es bien caro. ¿Cuánto paga?, mil 650. ¿Cada cuándo?, cada 20 días”, contó un habitante de San Simón Zahuatlán.

"¿Y sábados y domingos?”.

“No trabajan. Si hay una emergencia en la tarde, no nos agarran, la niña más pequeña que tengo se cayó y se abrió aquí. Llegué ahí y le dije, es una emergencia y me dijo, ya no hay servicio”.

A la falta de servicios de salud se suma la escasez de agua.

Se supone que era cada 20 días y ya pasaron 2 meses, doña Gaudemia tiene 75 años, no habla español, solo mixteco. En su frente sostiene el peso del bote de más de 35 kilos y está cubetita con otros 4 kilos.

En su rostro se ve el esfuerzo de subir, en un momento sus piernas parecen fallarle, se tambalea, pero tiene que seguir, hay 9 personas esperándola con el agua.

¿De dónde traen el agua?

“Donde está abajo, no sé cómo se llama, el río. ¿Cuánto tiene que caminar?, como dos horas, ¿es su mami?, se va solita, se va solita porque estoy cuidando a mi papá, ¿qué edad tiene?, no sé, es que no se leer”, dijo Benita, hija de doña Gaudemia.

Su papá perdió la vista. Vea sus pies llenos de bolas, aquí no hay quién los atienda. La pobreza es más que evidente, en dos cuartos están hacinadas 10 personas.

El 80 por ciento del pueblo se mantiene de esta actividad.

“Yo coso balones, ¿cuánto tiempo se tarda y cuánto le pagan?, al día me hecho tres balones, ¿y cuánto le pagan por balón?, 25 pesos”.

Hacen balones para salir adelante, pero no hay más trabajos. Su sueldo es de mil pesos al mes. Para llegar a esta comunidad, hicimos 8 horas desde Oaxaca capital.

Aquí se sobrevive con lo que se tiene, estudiar es simplemente imposible, no hay servicios de salud, ni tan básicos como el agua. Es el México que no se quiere ver, es de los más pobres y ahora también los más desprotegidos.

Contenido relacionado
×
×