La comunidad de Puerto Marqués, en Acapulco, Guerrero, está experimentando una notable reactivación económica y turística. Anteriormente, el sector sufrió pérdidas significativas debido a las disputas generadas por la implementación de un nuevo sistema de movilidad acuática, lo que resultó en una baja productividad y una escasa llegada de visitantes. Los prestadores de servicios lamentaron en su momento la falta de beneficios económicos durante el periodo de conflicto.
Sin embargo, la situación ha comenzado a cambiar gracias a una nueva atracción acuática. La llegada de visitantes a bordo del “Marina Bus” ha inyectado nueva vida a la economía de la Zona Diamante de Acapulco. Prestadores de servicios locales celebran que este flujo de turistas no solo genera más empleo, sino que también contribuye a una mayor seguridad y a la modernización de la zona. Los visitantes están disfrutando de las playas como Majahua y Pichilingue, llenando los establecimientos y reactivando todos los rubros económicos.
Con esta afluencia positiva, los habitantes y trabajadores han dejado atrás una campaña de desprestigio que circuló en redes sociales, la cual invitaba a no visitar Puerto Marqués alegando altos costos y otras anomalías. Ahora, la expectativa es alta para el cierre del año, ya que esperan que el destino continúe fortaleciendo su actividad económica y recupere su imagen positiva, demostrando que la calma y la prosperidad han vuelto a la zona.
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